Se acabó el puente.
Este puente, el puente de diciembre, es
el que espero con mas ansias una vez termina el verano. Representa, para mí, el
punto de partida de un mes súper especial, lleno de encuentros anhelados (otros
no tanto), lleno de días “no laborales”, lleno de comidas riquísimas, lleno de
deseos, lleno de abrazos, lleno de besos, el mes en el que despedimos el año y
le damos la bienvenida al año nuevo, un mes irrepetible, al menos hasta que
pasen otros 334 días.
Pues se acaba el puente y yo apuro estas
últimas horas para prepararles unas fotis que me hice en estos días con un
vestido mostaza que me encanta. Es un vestido largo de una especie de gasa muy
fluida y que gracias a nuestro fantástico clima me lo puedo poner en pleno
diciembre. En honor a la verdad les diré que lo combiné con una chaqueta de
ante camel pero me la quité para las fotos para que pudieran apreciar los
volantitos que tiene a modo de mangas y que son súper lindos, ;).
Los botines, la bandolera y el collar son
de nueva temporada así que si les gustan los pueden conseguir YA!.